Otra vez ocurre algo que disloca mi visión de las cosas. Estoy viviendo tanto últimamente, que en cuanto otra vez me encuentro sola, acuden los fantasmas.
Hace poco conseguí realizar uno de mis sueños pasados, antes tan inalcanzable, ahora ahí, a la vuelta de la esquina, pues sólo hizo falta aderezarlo con un poco de valentía y un punto de locura.
Pasan los días, y mientras me olvido de eso, porque no puede seguir, suceden más cosas, y me pregunto, porque a mí, y a donde voy, a subir, para luego bajar, a vivir para luego sentir que falta esa alegría, ese gozo que una vez exprimido, me arroja al abismo.
Pero el tiempo pasa, y lo que no haga ahora, que tengo oportunidades, se irá para siempre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario